El sistema de almacenamiento automatizado de ZIL de finales de los 70

WTF elevada a la enésima potencia. Foto Pila-dotoshnaya

Por AQUÍ ya hemos hablado en alguna ocasión del dramático devenir de la compañía automovilística ZIL. Su camino de clara decadencia tras el colapso de la URSS vivió un pequeño "impasse" cuando en 2008 se anunció que pasaría a colaborar con la compañía de camiones china Sinotruck a construir camiones HOWO, un espejismo que finalmente nunca se materializó. ZIL en la actualidad es una empresa en proceso de liquidación y el destino de su otrora moderna planta Likhachov ha sido sellado. El discurso oficial para tirar la planta abajo pasa por afirmar que no es deseo de nadie el contar con un segundo Detroit en el medio de Moscú. El discurso alternativo habla del altísimo valor de su céntrico solar en la que es considerada una de las ciudades más caras del mundo. Posiblemente la verdad sea una mezcla de ambas afirmaciones. Sea como sea el destino del emplazamiento de buena parte la planta moscovita de ZIL (otra parte será reutilizada por Renault y Fiat) ya está firmado y próximamente en lugar de sus gigantescos edificios industriales encontraremos lujosos bloques de apartamentos y parques donde adorables familias pasearán con sus chiquillos.



Ante el anuncio de recalificación de los terrenos y ante la inminente posibilidad de que las excavadoras hicieran acto de presencia buena parte de la comunidad stalker moscovita se puso en guardia y se lanzó a conocer los secretos de la abandonada planta ZIL antes de que esta pasase a la historia. Entre los lugares que la planta escondía en su interior antes de ser literalmente reducida a escombros resaltaban su refugio antiaéreo con capacidad para 3.000 personas en perfecto estado de revista (con preciosa centralita manual telefónica incluida) y su túnel de viento para pruebas aerodinámicas., ambos dos lugares espectaculares que llamaron la atención de cuantos pasaron por ahí.

El único que no abandonó su puesto de trabajo. Foto Samnamos

Pero si hubo un lugar escondido dentro de la planta de ZIL que realmente llamó la atención de los furtivos visitantes ese fue el edificio que albergaba el "Sistema de recuperación y almacenamiento automatizado de ZIL" construido a finales de la década de los 70. Concebido a mediados de la década de los 70 como un enorme almacén vertical el edificio consistía en dos estructuras rectangulares anexas la una a la otra. La primera de ellas, de 5 plantas de altura, albergaba oficinas de la administración, mientras que la más alta, de 11 plantas de altura, escondía en su interior el almacén automatizado en forma de intrincada matriz a lo Cube. El interior del almacén no puede ser más sugerente: una matriz metálica de aspecto infinito aparenta representar un escenario de ciencia ficción y descoloca al visitante.

Inception. Foto Samnamos

El almacén automatizado fue concebido y construido por la empresa de Alemania del Este "Mannesmann Geisel Gmbh" tal y como se puede apreciar en ESTA fotografía y constatar en ESTA patente. El contrato firmado con la multinacional se cifró en 8 millones de dólares de la época (unos 280 millones de dólares actuales) e incluyó la instalación de ocho sistemas de transporte completamente automatizados y controlados por ordenador (los sistemas de transporte así como una de las cabinas se pueden apreciar por su distinta pintura amarilla en ESTA foto). Sobra decir que este desembolso supuso una elevada inversión en alta tecnología por parte de la marca automovilística para la época (recordemos que estamos hablando de finales de lo 70).

Cabina de control. Foto Samnamos

El mismo sistema informatizado llevaba la gestión de los stocks guardados en más de 37.000 cajas distribuidas a lo largo, ancho y alto del edificio en cuestión. Edificio este que además contaba con sistema de calefacción, rociadores anti-incendios y sistemas de aireación. El funcionamiento del almacén era más o menos igual que el que podemos encontrar en almacenes automatizados hoy en día: se señalaba la pieza requerida en el ordenador y un ascensor guiado entre las gigantescas estanterías llevaba al operador a la celda deseada donde accedía a la caja o palé correspondiente y recogía las piezas necesarias. AQUÍ podéis ver una foto tomada en 1979 en el que aparece representado dicho sistema. 

Foto Samnamos

Si queréis disfrutar de una visita al almacén en cuestión os recomiendo ESTA, ESTA, ESTA, ESTA y ESTA galería donde además de fotos históricas de dicho lugar también podréis daros un paseo por el refugio y por el túnel de viento. Mucho me temo que esta es la única manera que tenemos de visitarlo ya que por desgracia este lugar paso a la historia recientemente como podéis apreciar AQUÍ o AQUÍ. Quien sabe en que habrá acabado convertido tal amasijo de metal. Sea como sea larga vida al almacén automatizado de ZIL.