sábado, 1 de julio de 2017

De giraldas, giraldillos y giraldillas

Encarando la Giralda, muy parecida a la de Kansas City. Foto Miguel
Como comenté en la anterior entrada la semana pasada me tocó pasar por Sevilla para arreglar algunos temas y dado que una de las tardes tocaba comida de confraternización en un centrico local y que mi hotel no quedaba lejos decidí irme dándome un paseo atravesando el casco histórico de la ciudad. Yo a Sevilla había ido a jugar al rugby en varias ocasiones pero de turismo solo fui una vez y hablamos de hace más de 25 años por lo que me apetecía recorrer, aunque fuera de manera un tanto apresurada, otra vez la almendra central de la capital andaluza.



Detalle de la estatua que corona la giralda con la calidad del zoom de mi nuevo y flamante smartphone. Foto Miguel
Admirando de nuevo la esbeltez de la famosa Giralda (campanario/alminar/minarete de la catedral sevillana) reparé en la estatua que lo corona y la verdad es que en ese momento me recordó a cierta escultura que recientemente había estado mirando en un lugar bastante lejano... en ese momento decidí investigar acerca de la estatua cuando volviese a casa pero mira tú que casualidad que rodeando la catedral para asistir a mi cita me topé de nuevo con la estatua en cuestión en una de las puertas anexas de la catedral...

Giraldillo frente a la puerta del Príncipe. Foto Miguel
El caso es que la casualidad quiso que en ese preciso instante y en ese preciso lugar un guía turístico comenzase la explicación a su audiencia sobre la estatua en cuestión, explicación a la cual como entenderéis presté atención especial de una manera un tanto furtiva... La estatua que podemos ver aquí mismo frente a la Puerta del Príncipe responde al nombre de "el Giraldillo" y esta en particular es una copia del original realizada en Madrid que se bajó del campanario en 2005 para ser sustituida por la estatua original tras pasar esta por un facelift. Tal y como podéis ver por AQUÍ la veleta original realizada en 1568 adolecía de problemas de oxidación por lo que se decidió tomar cartas en el asunto. El Giraldillo está hecho de bronce, pesa 1.200 kilos y mide casi tres metros y medio de altura representando en si mismo la Fe y el triunfo del cristianismo sobre el mundo musulmán... no es muy politicamente correcto pero es lo que hay. En su mano derecha porta un gran escudo que hace de veleta con una lanza coronada por una cruz cristiana y en la izquierda una palma. Tras casi 450 años coronando el cielo de Sevilla el Giraldillo es toda una eminencia en la ciudad hispalense y lo mismo da nombre a la revista cultural de la ciudad que se mide cara a cara con Goyas y Oscars para bautizar el nombre de los premios de cine o de flamenco de la ciudad.

La Giraldilla. Foto Miguel
Pues bien, como he comentado la visión del Giraldillo me retrotrajo a no hace muchas lunas cuando puse pie en el interior del Castillo de la Real Fuerza de La Habana y me encontré con la estatua que podéis ver más arriba, conocida popularmente como "La Giraldilla".

Detalle. Foto Miguel
La Giraldilla es el símbolo más antiguo de la ciudad de la Habana y la primera escultura fundida en Cuba. Fue ordenada al escultor habanero Gerónimo Martín Pinzón en 1630 por parte del gobernados y el capital general para instalarla en lo alto del la torre del homenaje del castillo. La estatua porta en una mano la Cruz de Calatrava a modo de veleta y en la otra las armas de su linaje.

Entrada del castillo. Foto Miguel
Al contrario que pasa en la Giralda con el Giraldillo la Giraldilla que podemos ver expuesta en el interior del castillo es la original mientras que la que giraldean aun en la torre del homenaje es una giralcopia realizada en la década de los 60.

Detalle del escudo que corona la entrada. Foto Miguel
Según cuenta la tradición popular la Giraldilla de la Habana fue esculpida a imagen y semejanza de Isabel de Bobadilla, única mujer que ostento el cargo de gobernadora de la isla de Cuba cuando su marido Hernando de Soto decidió hacer las américas yéndose a conquistar Florida en 1539.

Maqueta del castillo. Foto Miguel
Hernando de Soto muere en 1542 a orillas del río Misisipi de fiebre y no regresa jamás a La Habana donde su mujer lo lleva esperando desde que partiese tres años antes un poco al estilo La del Muelle de San Blas de los Maná.
Detalle. Foto Miguel
Según parece cuando la noticia llega a la Habana Isabel de Bobadilla no logra recuperarse y muere dando lugar así a la leyenda... leyenda porque según parece Isabel de Bobadilla terminó muriendo en España pero claro, en esa época no había Internet ni manera humana de verificar estas cosas para acabar con las leyendas.

Un lugareño indicándome donde ir. Foto Miguel
A día de hoy la Giraldilla es el símbolo de la ciudad de la Habana y sigue esperando a su amado desde dependencias del castillo y desde lo alto de la torre del mismo.

El backstage del tragabolas. Foto Miguel
Y ya que estamos en el interior del Castillo de la Real Fuerza AQUÍ comentemos algo del mismo. La construcción de este castillo, una de las edificaciones más antiguas de la ciudad, comenzó en Enero de 1588 y se prolongaría durante 19 años más. 
Preciosa maqueta del Santísima Trinidad construido en la Habana. Foto Miguel
Situado en la entrada de la bahía habanera frente a la elevación de la Cabaña el castillo tenía una situación estratégica importante teniendo como misión fundamental disuadir y repeler ataques de piratas y enemigos de la corona española. 

Por el otro lado. Foto Miguel
El castillo fue usado para guardar bienes valiosos como oro en su transito hacia la península y además de emplazamiento defensivo servía de residencia del gobernador de la isla.
Torre con la Giraldilla coronandola. Foto Miguel
El castillo es patrimonio de la UNESCO y sirvió de modelo, a pesar de sus deficiencias, para otras muchas fortificaciones que se fueron construyendo en el continente americano.

Castillo del Morro y la Cabaña desde el Castillo de la Real Fuerza. Foto Miguel
El crecimiento de la Habana dejó un tanto obsoleto al mismo y precisó la construcción de nuevas fortificaciones como el Castillo del Morro o el de la Cabaña posteriormente...

Patio. Foto Miguel
Pero vamos, que ya hablaremos algún día sobre ellos... por hoy está bien dejarlo aquí.
La Giraldilla mostrando su mejor perfil. Foto Miguel




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