Suecia capítulo 3: Hágalo usted mismo

Que levante la mano el que no conozca al personajillo de IKEA

El poderoso tejido industrial sueco tiene en parte, por supuesto, su origen en el carácter emprendedor de los propios suecos. Ya sus ancestros, los Vikingos, nos demostraron que no tenían mucho miedo a embarcarse en aventuras de toda índole y parece que parte de ese carácter ha perdurado en ellos hasta nuestros días. En Suecia, al igual que en general en todo lo que es Escandinavia, si hay algo que define a las personas es el "DIY", que en ingles corresponde a las siglas de "Do It Yourself" o "Hágalo Usted Mismo", lo cual es en si misma una filosofía y una forma de afrontar la de vida.

Biltema y su catalogo llevan ya muchos años ayudando a construir escandinavia

Pocos escandinavos conoceréis que no se monten la cocina ellos mismos, construyan sus propias casas de campo con sus manos o arreglen sus coches. El que encarga un trabajo de albañilería a un tercero no suele ser sueco de los de pura cepa, ya os lo digo yo. Fruto de esta filosofía nació IKEA (cuando todavía era sueca) por poner un ejemplo.

Los principios de IKEA, foto IKEA

El bueno de Ingvar Kamprad ya era un emprendedor nato desde que se tomó su primer biberón, como corresponde teóricamente a todo aquel que tenga el privilegio de nacer en la sureña región sueca de Småland. Kamprad creó IKEA con 17 años, la I y la K corresponden a las iniciales de su nombre como ya os he comentado mientras que  la E corresponde a la granja donde creció, Elmtaryd, y la A al pueblo donde se encontraba esa granja, Agunnaryd. Ingvar el joven comenzó su andadura empresarial vendiendo cajas de cerillas en bicicleta y le fue tan bien que acabó ampliando rápidamente su negocio a las semillas, carteras, lápices, etc. hasta que finalmente decidió dar el salto al negocio del mueble.

En 1951 edita el primero de sus famosos catálogos y en 1953 organiza su primera exposición. La vida parecía irle bien al bien a Ingvar hasta que un día la competencia, viendo como sus iniciativas tenían cada vez mas éxito y les restaban márgenes, deciden conchabarse con los fabricantes de muebles y cortarle el suministro de material, ¿resultado?, Ingvar no tiene un solo mueble que vender, game over.

Primer catálogo

¿Que es lo que paso entonces?, bueno, pues aquí es donde entra en juego el carácter emprendedor y de DIY de los suecos. Ingvar lejos de abandonar el negocio se puso en contacto con los proveedores de madera y comenzó a diseñar sus propios muebles minimizando costes y saltándose un escalón intermedio por lo que sus márgenes se agrandaron, como todos podéis imaginar la competencia por supuesto al cabo de los años desapareció, así como los fabricantes de muebles que le hicieron el boicot. Algo que sin duda le haría esgrimir una sonrisa de venganza fría a Ingvar.

IKEA es sin duda un ejemplo buenísimo de la mentalidad "hazlo tu mismo" sueca, uno entra en la tienda, mira la exposición, elije el mueble que le gusta y anota la referencia en la clásica hoja de pedidos de IKEA, posteriormente va a la sección del almacén y encuentra la sección y pasillo del producto que desea, recoge la o las cajas donde venga el mueble, lo paga, se lo lleva a casa en su propio coche y lo acaba montando. 

Entrevista laboral en IKEA: por favor, monte la silla y sientese

Por cierto,  debéis de saber que a la hora de diseñar un mueble en IKEA se exige que se haga de tal manera que estando desmontado este pueda ser dividido en una o varias cajas que puedan caber en el maletero de un coche estándar (aunque siempre hay excepciones). En el proceso de la compra de un mueble en IKEA solo falta que les apagues las luces y les cierres el local cuando te vayas.


Por cierto, que IKEA lleva ya bastantes años presente en Rusia. Aunque en España IKEA sea sinónimo de mueble de cierto estilo pero de calidad dudosa y precio muy bueno me dio la impresión a juzgar por el comentario que me hizo una vez en San Petersburgo un ruso, que tal vez en Rusia sea para algunos sinónimo de mueble de cierto estatus ligado a la Europa occidental. Las palabras mas o menos exactas que pronunció este conocido al tiempo que los ojos se le encendían fueron: "estamos (refiriéndose a el y a su pareja) ahorrando un poco para ver si podemos darnos el lujo de ir a IKEA a comprar algún mueble". No obstante para saber las experiencias de primera mano de un Español en los IKEA de Rusia os recomiendo las cojonudas hilarantes bitácoras que le dedicó al tema Alfor AQUÍ y AQUÍ.