jueves, 19 de enero de 2012

Si bebes no conduzcas... y menos vehículos blindados.




El vídeo de hoy fue grabado por un vecino de la localidad de Oktyabrskaya situada en los Urales allá por el 2008, como por entonces Rusadas no existia ni en mi imaginación pues lo comento hoy. En el se ve como un tanquista se sube a duras penas a un vehículo blindado de grandes dimensiones el cual tiene la pinta de ser un Tunguska del tipo de los que ya hablamos por este humilde blog AQUÍ.  El motivo por el que el tanquista encuentra tan difícil subirse a su Tunguska es porque en el brazo izquierdo sostiene 2 botellas de Vodka, y bueno, la verdad es que con toda esa nieve, el frió y las botellas como que subirse no debe de ser moco de pavo. De alguna manera el tanquista logró encaramarse sobre el vehículo y meterse por la escotilla hasta alcanzar el puesto de conducción. El tipo parece algo desorientado y en cierto momento parece perder el control de su vehículo para sorpresa-acojone del vecindario. Bueno, menos mal que iba en un blindado porque si no lo linchan. Por cierto, tal y como se explica en el vídeo, el ejercito al final se hizo cargo de los gastos... menos mal, porque esa grieta en invierno tiene pinta de dejar pasar aire y según tengo entendido en los Urales es recomendable pasar el invierno calentito. Vodka y Tunguskas, mala combinación.



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